Tengo un quiste por una endodoncia mal hecha: ¿qué hacer?
En muchas ocasiones, tras una exploración radiológica de rutina realizada por el odontólogo se puede descubrir la presencia de quistes asociados a piezas dentarias Se puede producir debido a varias razones como una endodoncia mal hecha.
¿Cómo se produce el quiste?
Estos quistes, conocidos como quistes periapicales, son cavidades presentes en el hueso de la mandíbula o el maxilar que se generan tras haber sufrido una infección del nervio de la pieza dental. Esta condición normalmente no va asociada a molestias o dolor a menos que se infecte, pudiendo provocar una inflamación en la zona. Radiográficamente, se observa una imagen oscura redonda u ovalada, bien delimitada, que se localiza alrededor del final de la raíz del diente afectado.
En la endodoncia
Si el nervio de un diente muere como resultado de una caries profunda o un traumatismo, habrá que extraer el nervio, desinfectar y sellar los conductos radiculares para evitar que se convierta en una fuente de infección. Si este tratamiento tiene éxito, los tejidos que rodean la raíz del diente no tienen porqué dar lugar a la formación de un quiste o un absceso.
El tratamiento endodóntico, incluso cuando se realiza una limpieza y sellado de los canales correcto, es posible que no de resultado y el quiste periapical persista radiográficamente en forma de cavidad oscura sin ningún síntoma asociado, dando lugar a una lesión periapical post endodóntica.
Cómo se corrige
Cuando la lesión periapical persiste después de la realización de la endodoncia, hay que considerar:
- Retratamiento del canal
- Cirugía periapical
- Extracción del diente afectado
El retratamiento de las lesiones periapicales requiere variaciones en el proceso, especialmente en casos de relleno incorrecto o defectuoso de los conductos radiculares, para así conseguir un buen resultado esta vez.