Volver al Blog

¿Qué es un fibroma y cómo afecta a tu salud dental?

24/03/2021 |

Un fibroma oral es una reacción similar a una cicatriz benigna común causada por una irritación persistente de larga duración en la boca.

Aunque fibroma oral es su denominación más común, también se le puede conocer por uno de los siguientes nombres:

  • Fibroma traumático
  • Hiperplasia fibrosa intraoral focal
  • Nódulo fibroso
  • Pólipo oral

¿Qué causa el fibroma oral?

El fibroma es el tumor más común de los tejidos orales y se clasifica como una hiperplasia reactiva generalmente causada por irritación local crónica. Aunque el fibroma de irritación desaparece normalmente si se elimina la causa de fricción, algunos fibromas o proliferaciones fibrosas (crecimiento de los tejidos) no están asociados con un traumatismo oral crónico, como son el fibroma de células gigantes o la fibromatosis.

Este tipo de lesiones se observa con mayor frecuencia en adultos mayores, pero puede ocurrir a cualquier edad. Afecta al 1-2% de los adultos.

Suele deberse a una irritación crónica provocada por morderse las mejillas o los labios, por frotamiento de un diente áspero o por el roce de dentaduras postizas u otro tipo de prótesis dentales.

A menudo, los pacientes son conscientes de que han estado traumatizando una zona varias veces. Incluso pueden admitir una masticación constante o crónica del crecimiento fibroso y llamar la atención del dentista. El comportamiento crónico del paciente a menudo se convierte en una práctica diaria estándar y puede hacer que el fibroma continúe aumentando de tamaño.

¿Cómo es el fibroma oral?

Un fibroma oral se presenta como una pápula suave y firme en la boca. Suele ser del mismo color que el resto del revestimiento de la boca, pero a veces es más pálido o, si ha sangrado, puede tener un color oscuro. Su superficie externa puede ulcerarse debido a un traumatismo o volverse áspera y escamosa. Por lo general, tiene forma de cúpula, pero puede tener un tallo corto como un pólipo (pediculado). Si se ha desarrollado debajo de una dentadura postiza, puede ser plano con forma de hoja.

La ubicación más común de un fibroma oral es en el interior de la mejilla, donde se unen los dientes superiores e inferiores. Otros sitios comunes incluyen los lados de la lengua, las encías y el interior del labio inferior.

Aparte del tacto y la apariencia, los fibromas orales no causan ningún síntoma. Se desarrollan durante semanas o meses hasta alcanzar un tamaño máximo, por lo general de aproximadamente 1 cm de diámetro, pero a veces pueden ser más grandes.

¿Cómo se diagnostica?

El diagnóstico de fibroma oral se sospecha clínicamente cuando existen los antecedentes habituales y los hallazgos del examen introral. Se puede tomar una biopsia para excluir otras afecciones o para extirpar la lesión. La histología muestra tejido fibroso denso típico con relativamente pocas células. El epitelio suprayacente puede estar ulcerado, adelgazado o engrosado.

Otras lesiones similares

Un fibroma oral suele ser una lesión solitaria. Cuando hay muchas lesiones, se deben considerar diagnósticos diferenciales. Un diagnóstico diferencial puede incluir lo siguiente:

  • Neurofibroma: masa de crecimiento lento que generalmente se encuentra en la lengua o en la mucosa bucal, pero también en otras ubicaciones.
  • Neurilemoma: se presenta con mayor frecuencia en la lengua y suele ir acompañado de algo de dolor.
    Lipoma: generalmente tiene un tono amarillo debido al contenido de lípidos
  • Fibroma osificante periférico: se presenta en la encía.
  • Fibrosarcoma: muy raro, pero deben descartarse todos los tumores de tejidos blandos. Los fibrosarcomas son indoloros, pero se agrandan gradualmente.

Tratamiento

Si se requiriera tratamiento, la única opción es su escisión quirúrgica con márgenes estrechos. Puede volver a aparecer después de la cirugía si la fuente de irritación continúa. Por tanto, también es importante controlar el origen de la irritación. Los fibromas orales no desaparecen sin tratamiento.
Por ello, es importante hacer que los pacientes abandonen los hábitos crónicos como morderse las mejillas y/o los labios, ayudando así a minimizar el trauma en los tejidos bucales.

El odontólogo debe determinar si el paciente está masticando el área durante la noche, durante el día o en otros momentos específicos. Los protectores nocturnos pueden ser útiles para los pacientes que tienen este hábito durante la noche.

Si se determina que el problema es el estrés ocasional, se pueden sugerir técnicas de reducción del estrés. Las nuevas estrategias de afrontamiento son cruciales para cambiar un hábito negativo crónico y modificar la forma en que reaccionamos a los factores estresantes. Algunas técnicas útiles pueden ser el ejercicio o la meditación.

Si el paciente fuma o bebe alcohol, debe existir una mayor preocupación relacionada con los posibles cambios futuros a que las lesiones se malignifiquen. Es importante que el odontólogo sugiera una biopsia si hay algún indicio de que el área de preocupación podría ser maligna. Siempre se debe considerar la biopsia cuando el crecimiento oral continúa después de que se retira el elemento de fricción original.

Necesito cita urgente
Necesito cita urgente
descubre nuestras clinicas
descubre nuestras clinicas