Qué es una limpieza bucal y cuál es la frecuencia recomendada
Acudir al dentista y realizarse una limpieza dental profesional es recomendable al menos una vez al año. Esta limpieza refuerza los hábitos de higiene bucodental que se realizan en casa.
La tartrectomía o limpieza dental realizada por el profesional, consiste en eliminar los depósitos de todas las superficies de los dientes con un dispositivo ultrasónico que las limpia eficazmente.
Las vibraciones que produce el aparato de ultrasonidos, ayudan a que los fragmentos de sarro más grandes se desprendan. A la vez que se producen las vibraciones, se rocía con agua fría la superficie de los dientes permitiendo que se limpien los desechos y se mantenga el área a una temperatura adecuada.
Las puntas de los instrumentos ultrasónicos son curvas y redondeadas y se mantienen siempre en movimiento alrededor de los dientes. No son afilados ya que su único propósito es simplemente soltar el sarro. Este tipo de dispositivos permiten configurar la potencia, permitiendo ajustar la presión a cada paciente.
En ocasiones, si existen zonas donde las puntas del ultrasonido no llegan, una vez que los pedazos más grandes de sarro se han desprendido, es necesario cambiar a herramientas de mano más finas para poder eliminar los depósitos más pequeños y suavizar las superficies de los dientes.
Una vez que todas las superficies estén lisas y limpias, hay que proceder a su pulido. Este pulido se realiza con una copa de goma o un cepillo suave y pasta de profilaxis, pasta arenosa que ayuda a eliminar las manchas superficiales y dejar los dientes lisos y brillantes.