Qué es cemento dental
El cemento dental es un tejido mineralizado similar al hueso que recubre la raíz del diente, la protege y también sirve como superficie de fijación para anclar el ligamento periodontal del diente al hueso alveolar.
¿De qué está compuesto?
Su apariencia es de color amarillo claro y es más delgado cerca del cuello del diente. Es ligeramente más blando que la dentina y está compuesto de minerales inorgánicos, principalmente cristales de apatita, de materia orgánica, principalmente colágeno y glucoproteínas y de agua.
Las fibras de Sharpey son porciones de las principales fibras colágenas del ligamento periodontal incrustadas en el cemento y el hueso alveolar que unen el diente al alvéolo.
El cemento se forma continuamente a lo largo de la vida porque se deposita una nueva capa de cemento para mantener intacta la unión a medida que envejece la capa más superficial.
Causas de la pérdida de cemento dental
La pérdida de cemento es uno de los principales factores que conducen a padecer sensibilidad dental, junto con la pérdida de esmalte y la recesión de las encías. El resultado es la exposición de la dentina.
La enfermedad de las encías también puede causar pérdida de cemento. Durante la periodontitis, se produce un daño irreversible en el hueso alveolar y en las fibras que mantienen los dientes en su lugar. En la periodontitis avanzada, ese hueso y el cemento se destruyen. Esto provoca un aflojamiento y movilidad de los dientes. En algunos casos, provoca la necesidad de extracción dental.
Si crees que puedes estar sufriendo un caso de sensibilidad dental (dolor de dientes al comer alimentos, beber líquidos y/o respirar aire frío), te recomendamos que pidas una cita online para que un especialista revise tu salud bucodental.
Proteger los dientes mediante un régimen de cuidado oral eficiente es la mejor manera de evitar posibles problemas con la pérdida de cemento o, en el peor de los casos, con la pérdida de un diente.