Infección en las muelas del juicio: causas y tratamiento
Las muelas del juicio o cordales son el nombre que tienen los dientes que erupcionan al final de cada hemiarcada. Al estar en esa posición, su limpieza es complicada pudiendo llegar a producirse una infección debido a que los restos de alimentos pueden quedarse atrapados entre las muelas y la encía.
Causas de la infección de las muelas del juicio
Cuando no existe espacio suficiente en la cavidad oral para que estas muelas erupcionen, pueden quedarse impactadas, no creciendo correctamente a través de las encías, emergiendo parcialmente, en ángulo o completamente de lado. Estas muelas tienen un mayor riesgo de infección debido a que su forma y posición es más susceptible de que aparezca caries.
Pericoronitis
La pericoronitis es una inflamación del tejido que rodea a la muela del juicio. Esto puede suceder debido a una infección como resultado de una caries o de la poca higiene de la zona.
Cuando solo una parte de la muela ha erupcionado, puede crearse una solapa de tejido blando que retiene fácilmente los restos de alimento, convirtiéndose en un nicho de bacterias.
La pericoronitis también puede producirse en muelas del juicio que no han brotado en absoluto y todavía se encuentran debajo de la encía.
La pericoronitis puede tratarse con antibióticos y enjuagues de agua y sal o de clorhexidina, lo que hará que la afección desaparezca pero puede volver a aparecer si los desechos alimenticios y las bacterias continúan acumulándose debajo del colgajo.
Tratamiento para la infección de las muelas del juicio
Como tratamiento, el odontólogo puede proceder a sanear la zona a fondo eliminando el tejido dañado o el pus. Además proporcionará una serie de instrucciones para mantener el área limpia, que es la mejor manera para evitar que el problema aparezca de nuevo.
En algunos casos, el profesional podrá sugerir la extracción de la muela del juicio una vez que la infección esté bajo control, evitando así que se produzca de nuevo la pericoronitis.
La pericoronitis no causa efectos a largo plazo. Si la muela del juicio se extrae o termina de erupcionar de manera completa, la infección no volverá a producirse.
