¿El vino mancha los dientes?
El vino tinto es una bebida muy popular en nuestra dieta mediterránea. Desafortunadamente, el vino, sobre todo el vino tinto, puede dañar los dientes. Los dientes pueden volverse de un color púrpura suave después de beber vino tinto. Con el tiempo, este tipo de bebida puede provocar que los dientes se vuelvan más marrones, azules, grisáceos o morados.
¿Por qué el vino puede cambiar el color de los dientes?
Esta decoloración ocurre porque el vino tinto contiene ácidos, taninos y tintes naturales, todos los cuales pueden dejar los dientes grabados y manchados.
Hay dos factores que determinan la gravedad de las tinciones de los dientes por el vino:
- la naturaleza del vino tinto
- las particularidades del esmalte dental
Vamos a analizar estos dos factores por separado.
La naturaleza del vino tinto
El vino tinto es rojo debido a las antocianinas, que son los pigmentos de las uvas que le dan al vino tinto su color púrpura.
También tiene un alto contenido de taninos, que provienen de la piel, las semillas y los tallos y que le otorga una astringencia deliciosa, pero, en un giro desafortunado, ayudan a que el pigmento se adhiera a los dientes.
Y, por último, los dientes son vulnerables en ese momento a un tercer factor: el ácido. El vino tinto es ácido, y esta acidez graba el esmalte, haciéndolo más poroso y facilitando que la mancha se adhiera. El vino blanco también es ácido, incluso más ácido que el tinto de hecho, pero no mancha los dientes porque es blanco.
Las particularidades del esmalte dental
Además, no todos los dientes son iguales. La placa bacteriana acumulada sobre la superficie de los dientes puede provocar la aparición de manchas por lo que sería recomendable cepillarse los dientes 30 minutos antes de beber.
El tener los dientes manchados de vino no es indicativo de tener un problema de higiene. O al menos, probablemente no. También hay que considerar la genética. Hay personas más propensas a la acumulación de placa o incluso personas con un esmalte más fuerte que otras
Para entender cómo funciona la tinción del diente por el vino tenemos que conocer:
Cómo está compuesto el diente
El diente está formado por 4 «capas» denominadas:
- Esmalte: capa exterior dura que protege los dientes de las agresiones externas.
- Dentina: segunda capa del diente que consiste en tejido vivo que se comunica con el nervio de los dientes.
- Pulpa: centro blando del diente formado por el nervio, los vasos sanguíneos y los tejidos conectivos.
- Cemento: tejido conectivo que se forma a lo largo de las raíces de los dientes, uniéndolos a las encías y al hueso.
Las manchas en los dientes provocadas por el vino se consideran manchas extrínsecas.
Estas son las manchas en las que la causa y el efecto son más evidentes, ya que se encuentran en la superficie exterior de los dientes: el esmalte. Las manchas extrínsecas son causadas por la pigmentación de lo que se consume, en este caso por el vino. Estas manchas en el esmalte dental empeoran gradualmente con el tiempo.
La tinción extrínseca es difícil de evitar ya que gran parte de nuestra dieta es una causa potencial; por suerte estas son también las manchas más sencillas de remediar.
¿Cómo combatir las manchas extrínsecas en el esmalte dental producidas por el vino?
Existen acciones que pueden mitigar la tinción de los dientes al tomar vino:
- Cepillarse antes, pero no justo después ya que la fricción del ácido con el cepillo sobre la superficie de los dientes puede provocar más grabado.
- Conviene no beber vino blanco antes que vino tinto, ya que el exceso de ácido en el blanco exacerbará las manchas.
- Lo que es esencial, es mantener un cuidado saludable del esmalte y prevenir la acumulación de placa para que el pigmento del vino tenga más dificultades para adherirse a los dientes.
La elección de un tratamiento eficaz para eliminar este tipo de manchas, requiere la evaluación por parte de un dentista o de un higienista dental, para comprobar qué tipo de decoloración se tiene. Una evaluación clara de la causa de la decoloración permitirá un tratamiento específico y se logrará un mejor resultado.
Visitar a un dentista y un higienista dental ayudará a identificar la causa de los dientes manchados o descoloridos y proporcionará las mejores opciones de tratamiento para blanquear los dientes.
Después de una limpieza a fondo realizada en la consulta dental, las manchas extrínsecas se pueden tratar con un blanqueamiento dental profesional, siempre y cuando todos los dientes que se blanqueen sean dientes naturales y no haya otras razones para la decoloración de los dientes.
Para explorar una rutina de blanqueamiento más extensa, lo mejor es visitar al dentista y preguntarle acerca de las inquietudes específicas, para que la recomendación del mejor método de blanqueamiento dental cubra las necesidades de cada caso.
Al igual que con el resto de las preocupaciones dentales, mantener un compromiso con las limpiezas y las revisiones periódicas puede contribuir en gran medida a prevenir las manchas permanentes de las bebidas ácidas o los alimentos que se desean disfrutar de vez en cuando.