¿Cuánto tiempo dura un implante dental?
Los implantes dentales pueden durar toda la vida. Suele ser la corona que se coloca en la parte superior del implante la que puede necesitar ser reemplazada después de 8 a 10 años debido a su posible desgaste. Pero, como en todo, el cuidado y mantenimiento adecuado es importante para garantizar esta durabilidad.
El tiempo de duración de un implante depende del caso de cada paciente. Dado que el implante de titanio se fusiona con el hueso, proceso conocido como osteointegración, puede durar toda la vida, siempre que el hueso maxilofacial se mantenga sano.
Qué pasa cuando falla un implante
Sin embargo, los implantes dentales pueden fallar. En ocasiones, por causas desconocidas, el hueso no integra el implante y éste se acaba perdiendo. Esto implica la necesidad de repetir la fase quirúrgica, y en ocasiones replantear el tratamiento. El hecho de que el implante se hubiera integrado en el hueso en un primer momento no implica que no pueda fracasar posteriormente.
Por qué puede haber fallado un implante
Las causas del fallo de un implante son diversas. Algunas de los factores más habituales son:
- Mala higiene bucodental
- Hábitos perjudiciales como fumar tabaco
- Oclusión de los dientes superiores e inferiores
- Falta de revisiones periódicas
- Factores intrínsecos a la propia biología del paciente.
Estos factores son los que suelen provocar que los implantes fallen. En una boca sana en la que el hueso de la mandíbula se mantenga sano, los implantes pueden durar toda la vida. Esto es debido a que el implante se fusiona con ese hueso.
Higiene dental deficiente
El factor principal que influye en el posible fracaso de los es una higiene dental deficiente. Igual que esta mala higiene afecta al estado de nuestros dientes naturales necesita encías sanas para sostenerlos. Cepillarse y usar hilo dental minuciosamente todos los días es esencial tanto para el mantenimiento de los implantes como de los dientes.
Fumar
El hábito del tabaco también es altamente desfavorable para la integración de los implantes en el hueso y para la prevención de la periimplantitis, esto es una infección alrededor de los implantes que puede conducir a la pérdida de los implantes. El tabaco inhibe el flujo sanguíneo, lo que afecta al proceso de curación después de la cirugía de implantes. Incluso después de que el implante se haya unido con éxito al hueso, fumar puede causar inflamación, infección y, en última instancia, su fracaso.
Garantía de los implantes
En definitiva, para poder garantizar el éxito de los implantes, se debe seguir un plan de revisiones y mantenimiento así como los consejos y pautas de tratamiento dados por el profesional y consultar cualquier eventualidad que ocurra y que parezca anormal. Además debe seguir meticulosamente las instrucciones de higiene del implante y de la prótesis y acudir a las revisiones periódicas acordadas con el profesional, al menos cada seis meses, y siempre que tenga cualquier molestia o duda sobre el tratamiento.
Tanto los implantes como la prótesis soportada por ellos deberán ser renovados, debido a las fuerzas masticatorias y al paso del tiempo, en un plazo de tiempo que puede variar según cada paciente.
