CARILLAS DE PORCELANA

¿Qué son las carillas de porcelana?

Las carillas de porcelana, también conocidas como carillas dentales o estéticas, son un tipo de tratamiento dental que consiste en adherir unas láminas muy finas al diente. Su principal objetivo es mejorar la apariencia estética de la boca del paciente, corrigiendo la forma de los dientes, cubriendo huecos entre sus piezas dentales, ocultando fracturas y daños estructurales o solucionando problemas de desgaste, entre otros.

Las carillas de porcelana tienen un grosor de entre 0,2 y 1,2 mm, lo que asegura la comodidad y un aspecto muy natural. Por esta razón, es uno de los tratamientos relacionados con la estética dental más efectivos que existen, especialmente recomendado para aquellas personas que no están satisfechas con la apariencia o la forma de su dentadura.

Tipos de carillas de porcelana

Existen tres tipos de carillas de porcelana de cerámica, que se distinguen por sus características y los usos que se hacen de ellas:

Ultrafinas

Como su propio nombre indica, son más finas que las demás y, a la vez, más resistentes. Para su fabricación se utiliza porcelana inyectada, que proporciona mucha más resistencia que otros tipos de carillas de porcelana. Gracias a su reducido grosor, pueden colocarse sin necesidad de tallar el diente.  

De zircono

Suelen ser mucho más gruesas y opacas que las carillas ultrafinas, y sólo se utilizan en casos muy específicos.

Feldespáticas

Consisten en unas láminas de entre 0,2 y 0,5 mm y consiguen unos resultados mucho más estéticos. Sin embargo, son más frágiles que los dos tipos anteriores, por lo que generalmente están indicadas para pacientes que tengan anomalías de carácter leve.

Disilicato de litio

El disilicato de litio es un material que surge de una mezcla entre vidrio y cerámica. Es utilizado para realizar coronas, carillas y puentes, entre otros. Su durabilidad ha demostrado ser tres veces mayor que la de otros materiales. El disilicato de litio se caracteriza por su fácil manejo, su alta resistencia y su cementación, lo que se traduce por una mayor adherencia al tejido dental y, por consiguiente, una unión más duradera.

Ventajas de las carillas de porcelana

Las carillas de porcelana tienen una serie de ventajas para los pacientes que las llevan:

• Cuentan con un nivel de dureza superior al esmalte natural. Además, el tratamiento es mucho más duradero, ya que mantienen el brillo y el color de la dentadura de manera indefinida.
• Es un tratamiento poco invasivo y que no genera ningún tipo de dolor ni molestia para el paciente que lo lleva.
• A diferencia de otros tratamientos similares, no se tiñen con sustancias como el tabaco, el café o el té.
• Las características de la porcelana hacen que las carillas sean indistinguibles de los dientes naturales. Además, su unión al esmalte dental es muy fuerte, por lo que nadie notará que las llevas puestas.
• Por lo general, no precisan mantenimiento ni tratamientos posteriores más allá del cuidado bucodental que cualquier persona realiza en su día a día.
• Son extremadamente cómodas a la hora de hablar o comer.
• Existe una amplia variedad de opciones entre las que elegir, por lo que son bastante personalizables en función de las necesidades del paciente: más volumen de forma o un tono del diente mucho más blanco.
• Son mucho más duraderas que otras carillas. Así, mientras las carillas de composite duran un máximo de 5 años, aproximadamente, las de porcelana pueden durar alrededor de 10 o 15 años si la persona las mantiene correctamente.
• Es posible combinar el tratamiento de carillas con otros tratamientos dentales previos, como, por el ejemplo, la ortodoncia.

Fases del tratamiento de las carillas de porcelana

Existen cuatro fases en el tratamiento de la colocación de las carillas de porcelana:

1. Análisis estético y modelo de estudios. El especialista se reúne con el paciente en una primera sesión para realizar un estudio pormenorizado en el que se analizan los parámetros de los dientes. En esa misma cita se acuerda cuál es tratamiento necesario.

2. El especialista realiza un mockup o maqueta para que el paciente vea un resultado aproximado del tratamiento que se va a llevar a cabo. Así, se puede hacer una idea de la forma definitiva de los dientes.

3. Preparación de los dientes, para lo que se toma un molde virtual o convencional sobre el que trabajarán las carillas de porcelana. En esta fase se prepara el diente por su cara exterior, puliendo simplemente sus imperfecciones y redondeando ángulos. Tras la toma de impresiones convencionales o digitales, se mandan a fabricar al laboratorio según las indicaciones del profesional y se colocan unas carillas provisionales durante el proceso de fabricación para proteger los dientes tras el tallado.

4. En la última fase se retiran las carillas provisionales y se procede a la cementación de las carillas definitivas de cerámica.